El gobierno de Estados Unidos endureció la semana pasada las sanciones petroleras y puso fin a la licencia que permitía a Chevron operar en Venezuela. En caso de incumplir la medida, la empresa puede enfrentar severas consecuencias.
Chevron tendrá que cesar sus operaciones en territorio venezolano antes del 3 de abril. La Administración de Donald Trump dejó claro que, en caso de seguir extrayendo crudo, la petrolera podría enfrentar sanciones del Departamento del Tesoro.
Especialistas han indicado que Chevron perdería acceso al sistema financiero estadounidense si viola las sanciones. Esto limitará su capacidad de realizar transacciones en dólares, lo cual afectará sus operaciones globales.
Sin embargo, Chevron también se podría enfrentar a otras severas consecuencias, como el bloqueo de sus activos en Estados Unidos o la exclusión de contratos entregados por el gobierno norteamericano.
IMPACTO A LOS NEGOCIOS
Estas medidas impactarían directamente a Chevron. Varias empresas o bancos podrían evitar hacer negocios con la petrolera, puesto que muchos organismos internacionales cumplen las sanciones para evitar represalias de la Casa Blanca.
Chevron también podría tener serias dificultades de conseguir financiamiento si desafía el fin de la licencia. Asimismo, tendría problemas para obtener tecnología de punta o mantener su infraestructura en otros países.
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El alcance de las sanciones llegarían a generar problemas a los ejecutivos y empleados de Chevron. Así pues, algunas personas vinculadas a la petrolera podrían enfrentar demandas, restricciones de viaje o hasta acusaciones criminales.
Chevron, que lleva varios años operando en Venezuela, no se ha pronunciado sobre el fin de la licencia. Sin embargo, la presión de la Casa Blanca haría insostenible la presencia de la petrolera en territorio venezolano.
