El presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, elevó nuevamente la tensión en el Caribe tras confirmar que sus fuerzas están persiguiendo a un petrolero presuntamente vinculado al crudo venezolano sancionado, en una operación que se desarrolla cerca a aguas internacionales del país sudamericano.
La operación se enmarca en la estrategia anunciada por el mismo Trump la semana pasada de bloquear todos los buques petroleros sancionados que entren o salgan de Venezuela.
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«Lo conseguiremos», expresó Trump en repuesta a la periodista Samantha Waldenberg, quien cubre la Casa Blanca para la cadena estadounidense CNN.
El navío, identificado como parte de la llamada “flota oscura”, habría navegado bajo bandera falsa y está sujeto a una orden judicial de incautación, de acuerdo con lo revelado más temprano el mismo lunes por fuentes anónimas de Reuters y CNN.
De concretarse, sería la segunda operación de este tipo durante el fin de semana y la tercera en menos de dos semanas.
“La Guardia Costera de Estados Unidos está en persecución activa de un buque de la flota oscura sancionado. Está involucrado en la evasión ilegal de sanciones vinculadas a Venezuela. El barco navega con una bandera falsa y tiene una orden judicial de incautación”, explicó un funcionario estadounidense.
La operación se desarrolla en aguas internacionales del Caribe, cerca de la costa venezolana, según lo señalado por los medios de comunicación.
Lo que se informó es que el buque perseguido, identificado como el Bella 1 o el Canopus Voyager, se dirigía hacia puertos venezolanos para cargar crudo.
Las autoridades norteamericanas sostienen que la embarcación está vinculada con redes de evasión de sanciones. También con el transporte de petróleo procedente de Irán y Venezuela.
¿QUÉ HARÁ TRUMP CON LOS BUQUES Y SU PETRÓLEO?
Durante la presentación de una nueva generación de acorazados —a la que sectores de su administración ya llaman “clase Trump”— el mandatario afirmó que parte del crudo confiscado podría ser destinado a las Reservas Estratégicas de Petróleo de Estados Unidos, mientras que los buques involucrados en estas incautaciones también quedarían bajo control estadounidense.
«Lo vamos a conservar. Tal vez lo usemos en las Reservas Estratégicas. Nos quedamos con los barcos también», así respondió Trump a los periodistas.
