El pasado 26 de noviembre, el suburbio de Mansfield, en Texas (EEUU), se convirtió en el epicentro de un espectáculo navideño con drones sin precedentes que rompió un récord mundial Guinness.
La empresa Sky Elements Drone Shows, en colaboración con UVify, utilizó casi 5.000 drones para crear una iluminación espectacular en el cielo nocturno.
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Este impresionante evento fue catalogado como «la exhibición aérea más grande de un pueblo de pan de jengibre hecho con drones», superando ampliamente el número mínimo de 1.000 drones requeridos para el récord.
El espectáculo comenzó con un enorme pavo que desplegó sus plumas en una explosión de colores otoñales, en honor al Día de Acción de Gracias.
Luego, los drones formaron un muñeco de nieve gigante y una villa de jengibre iluminada, con detalles como linternas de bastones de caramelo, techos de golosinas y casas que parecían cobrar vida en el cielo.
La estrella de la noche fue Santa Claus, quien surcó el cielo en su trineo tirado por renos. Este evento no solo deleitó a los asistentes, sino que también demostró el increíble nivel de innovación y dedicación de los equipos involucrados.
Llevar a cabo un espectáculo de esta magnitud requirió meses de preparación y la participación de expertos en animación, especialistas en drones y técnicos especializados.
Preston Ward, piloto principal de Sky Elements, explicó que lograr un espectáculo de esta envergadura no solo demandó creatividad, sino también una coordinación impecable entre los equipos.
La empresa Sky Elements ha establecido ya once récords Guinness con eventos similares, destacando su liderazgo en la creación de espectáculos aéreos con drones.
