El presidente de EEUU, Donald Trump, ordenó la publicación de miles de documentos gubernamentales secretos relacionados con los asesinatos de John F. Kennedy, Robert F. Kennedy y Martin Luther King Jr.
Esta decisión, anunciada este jueves, 23 de enero, forma parte de una serie de decretos ejecutivos firmados por Trump en la primera semana de su segundo mandato.
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La medida busca poner fin a décadas de especulación y teorías de conspiración en torno a estos trágicos eventos históricos.
Durante una ceremonia en la Oficina Oval, Trump declaró que «todo será revelado».
Esta acción responde a una promesa de campaña de Trump, quien ya había intentado desclasificar estos documentos durante su primer mandato, pero cedió ante las apelaciones de la CIA y el FBI para mantener algunos archivos en secreto.
La orden ejecutiva instruye al director de Inteligencia Nacional y al secretario de Justicia a desarrollar un plan para la divulgación completa de los registros restantes en un plazo de 15 días para el caso de John F. Kennedy y 45 días para los otros dos casos.
La publicación de estos documentos podría arrojar nueva luz sobre los asesinatos que han captado la atención del público durante décadas.
John F. Kennedy fue asesinado en Dallas el 22 de noviembre de 1963, y su presunto asesino, Lee Harvey Oswald, fue asesinado dos días después por Jack Ruby.
Robert F. Kennedy, hermano del presidente, fue asesinado en 1968 cuando lideraba las primarias demócratas. Mientras que Martin Luther King Jr., líder del movimiento por los derechos civiles, lo mataron el mismo año en Memphis.
La decisión de Trump la recibieron muchos con interés y escepticismo. Algunos expertos creen que la publicación de estos documentos podría revelar detalles importantes que han sido ocultados durante años. Pero otros piensan que es poco probable que se descubran revelaciones impactantes.
Larry J. Sabato, director del Centro de Política de la Universidad de Virginia, señaló —citado por la Voz de América (VOA)— que «siempre existe la posibilidad de que algo se deslice que sería la pequeña punta de un iceberg mucho más grande que sería revelador».
