AN 2020 aprueba petición de romper relaciones diplomáticas y comerciales con España, se la llevarán a Maduro

Carlos Ramiro Chacín
Por Carlos Ramiro Chacín 3 Min de Lectura
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La Asamblea Nacional electa en 2020, controlada por el chavismo, aprobó este martes un acuerdo con el que exhorta al gobierno de Maduro a romper relaciones diplomáticas y comerciales con España.

El presidente del Parlamento, Jorge Rodríguez, pidió a los diputados votar esta resolución. Además, recordó que la medida era una respuesta al reconocimiento que dio el Congreso de España a Edmundo González.

«Rogar encarecidamente este cuerpo que aprobemos (…) un acuerdo donde solicitamos que el gobierno de la República Bolivariana de Venezuela rompa relaciones diplomáticas, comerciales y consulares con el Reino de España», dijo Rodríguez.

Con esta votación mayoritaria, el Parlamento aprobó el «Acuerdo en rechazo a la decisión grosera e injerencista adoptada en el Congreso de España». Además, condenó el «desconocimiento a la victoria popular de Nicolás Maduro».

ENVIARÁN EL ACUERDO A MADURO

Rodríguez sostuvo que la ruptura de relaciones debe darse de forma «perentoria», indicando la urgencia de la decisión. Incluso, llamó a los diputados a votar de forma «entusiasta» y aprobar «indignados» el acuerdo.

Cabe destacar que el acuerdo pide romper las relaciones con España, pero no aplica todavía la medida. Por tanto, Rodríguez pidió enviar el documento a Maduro, quien finalmente debe dar el visto bueno a la decisión.

Los diputados votaron a favor de la ruptura de relaciones con España. Foto: Asamblea Nacional

Rodríguez exigió a mediados de septiembre romper relaciones con España, luego de que el Congreso de ese país desconociera los resultados de las elecciones. Pocos días después, bajó el tono y pidió «evaluar» la ruptura.

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Aunque el gobierno de Maduro llamó «injerencista» a España y citó al embajador de ese país, no rompió relaciones. Incluso, la vicepresidenta Delcy Rodríguez se reunió con directivos de la petrolera española Repsol.

Por su parte, el gobierno de España pidió en septiembre tranquilidad para las empresas españolas y aseguró que sus intereses económicos en Venezuela «están a salvo». También aseguró que «no ha habido ningún cambio» ni «ninguna medida concreta».

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