«Había un policía encubierto que sabe que allí no se cometió ningún delito», hablaron dos de los detenidos por caso del sauna en Valencia

Jhoan Melendez
Por Jhoan Melendez 3 Min de Lectura
3 Min de Lectura
Foto: Captura de video

Iván Darío Valera y Alfredo Rodríguez, dos de los detenidos por el caso del sauna en Valencia, rompieron el silencio sobre lo que ocurrió el domingo 23 de julio, asegurando que en el sitio había un policía encubierto quien tiene certeza que en el lugar no se cometió ningún acto ilegal.

Ambos ofrecieron una entrevista al medio WTC Radio para comentar lo que vivieron durante su detención.

LEA TAMBIÉN: PROTESTARON EN EL MP POR «CRIMINALIZACIÓN» LGBTIQ+, PIDEN CIERRE DEL PROCESO PENAL SOBRE CASO DEL SAUNA EN VALENCIA

Valera, quien es activista de DDHH, relató que estaba en la sala de estar tomándose una bebida con un amigo. De repente, entra un comando de la PNB. «Dicen ‘manos arribas y todos quietos donde están’. En ese momento pensé que era una broma. Creí conocer el país donde vivo, pero hoy lo desconozco«.

En simultáneo, Rodríguez preguntó a los funcionarios qué pasaba. «Dicen que es inspección de rutina, que constataban que el local operaba bajo permisos».

TRASLADADOS A LA SEDE DE LA POLICÍA EN LOS GUAYOS

Supuestamente, los llevaron a la sede de la PNB en Los Guayos para que declararan «como testigos». Sin embargo, ahí es cuando todo empeoró.

«De repente inició el psicoterror de parte de la PNB indicando que estábamos metidos en tremendo problema… Nos damos cuenta de que estamos detenidos, cuando nos empiezan a tratar como delincuente y nos dicen ‘vamos a tomarles una foto'», añade Iván Darío.

Por su parte, Alfredo, quien es venezolano residente en EEUU donde trabaja como médico cirujano, revela que cuando estaban en la comandancia, notan que había un funcionario de encubierto. «Él podía ser testigo garante que ahí no se cometía ningún tipo de delito o ultraje al pudor, como se dijo en una denuncia que parece ser anónima».

«INDIGNACIÓN, DESESPERO Y GANAS DE MATARSE»

Valera habló lo que sintió al respecto y lo que pudo percibir en otras personas detenidas.

«Sentí tristeza y vergüenza irónicamente, cuando no haces nada. Pero estamos en un país donde estamos a un clic de dañarle la vida a cualquiera«, narra.

En los demás, vio desespero, indignación, tristeza, ganas de matarse. «Uno de mis compañeros manifestó que se quería suicidar. Uno no sabía si quería salir o quedarse allí», subrayó.

Iván coincide con Alfredo en que hubo irregularidades en todo el proceso de aprehensión e imputación.

El MP acusó a 30 personas de “Ultraje al Pudor” y “Contaminación Sónica”, mientras que a los tres que aún hasta este domingo siguen presos, se les suma “Agavillamiento”.

ETIQUETADO:
Compartir este artículo